
Estos días ando mirando la vida con otros matices (
más brillantes y coloridos)... Los mismos lugares no paran de sorprenderme (
me tropiezo con tesoros escondidos en los rincones)... Voy abrazándome en los pasillos con las miradas (
y llevandómelas enganchadas)... Las sonrisas mueven fibras dentro (
como si se tocaran los corazones)... Las voces ultraconocidas, ahora tienen música (
y me hacen mover los pies)...
Con el conteo regresivo de mi partida cada momento se vuelve único e irrepetible... Y me vuelvo un manojo de nostalgias contenidas (
echando de menos por adelantado lo que quisiera atesorar y no puedo llevarme en las maletas)...
Esa vida
MARAVILLOSA (
con mayúsculas), parece opacarse con la costumbre... Se ilumina (
radiante) cuando es inminente la despedida... Irónico, el hecho de valorar lo que se tiene justo cuando se pierde... Reconocer mi tierra fértil (
con árboles frondosos y pajaritos cantando), cuando el arado me espera en una nueva parcela (
distante y desconocida)... Con la sensibilidad a flor de piel, no puedo evitar que se me empañe la mirada... Aguardo a los milagros (
que conspiran contra el universo cuando son profundos nuestros deseos)... Iré en busca de esos sueños que me saludan desde la otra orilla (
recordando que mi mar me espera)... Sabiendo que adonde se pertenece, los viajes
SIEMPRE son de ida y vuelta (
esto, sólo físicamente, porque de allí la esencia NO se mueve, se queda)...